Recetas del mundo

Thalia Morales · Cocinero Invitado

Sabemos que dentro de nuestro propio hogar estamos expuestos a enfermarnos, pues no siempre seguimos ciertos consejos para una limpieza profunda.

Es más, dentro de la cocina existe un foco de transmisión de gérmenes que en ocasiones las personas desestiman, sin saber el riesgo que tiene para su salud. Se trata de las esponjas.

Enemigo en el fregadero

El doctor Ricardo Guardia comenta que las esponjas que uno utiliza “diariamente” para limpiar los utensilios contienen más gérmenes y bacterias de lo que las personas creen.

“En ocasiones la gente lava algo tantas veces que cree que así estará limpio, obviando que las propias esponjas pueden permitir que quede lleno de bacterias”, explicó.

Por ejemplo, los cubiertos que creyeron haber desinfectado con esa esponja sucia, lo usan posteriormente para ingerir algún alimento, agregó Guardia.

Aprendiendo de las abuelas

Claudia de Santos conoce muy bien sobre este problema. Cómo no va a saberlo si antes de percatarse de esta amenaza limpiaba platos, ollas y vasos con la misma esponja. “Grave error”, mencionó esta jubilada de 60 años.

Santos concuerda con el doctor Ricardo Guardia, en este tipo de utensilio de limpieza debe ser cambiado cada dos semanas.

“Aunque luego de transcurrido este tiempo tengan buena apariencia es mejor que sean botadas inmediatamente al tinaco de la basura”, aseguró Santos.

Por su parte, Aminta de Ríos señala que para cuidarlas en el lapso que se tengan en el fregadero es bueno lavarlas con agua caliente para así “matar ciertas bacterias que puedan tener”.

Basada en su experiencia indicó que es preferible tener más de una esponja para determinados artículos que se empleen en la cocina.

No se trata, precisó, de tener una colección de esponjas de distintos colores, tamaños y formas, sino más bien “fijar un parámetro de qué se puede asear con qué”.

“No es lo mismo fregar un tenedor que una paila donde se acaba de hacer el arroz de la cena”, concluyó.

Otros cuidados

Las esponjas de cocina que se venden en el mercado se caracterizan por ofrecer suavidad, flexibilidad y una largo periodo de existencia.

Al elegirla, dice el doctor Guardia, las personas deben evaluar cómo se sienten usándolas para que no les causen incomodidad. “Esto principalmente mantendrá el cuidado de las manos, destacó el médico”, explica.

Thalia Morales
Recordó que las esponjas usadas para el fregador deben usarse para lavar exclusivamente los utensilios de la cocina.

“No deben ser empleadas para asear otros lugares de la casa como el inodoro o los baños”, enfatizó.

Tampoco las esponjas pueden ser utilizadas para lavar ciertos alimentos como las verduras, concluyó Guardia.

Google